Un lugar donde la paz y la tranquilidad son los protagonistas: El Pinar de Tamadaba (Gran Canaria)
Hoy os enseñaré un espacio natural protegido desde 1987. El Pinar de Tamadaba es uno de los pinares naturales de pino canario más extenso y mejor conservado de la isla Gran Canaria. Pocas veces, por no decir ninguna, encontraremos en este lugar bullicio alguno. Normalmente se respira silencio y se siente armonía propiciada por el frescor de los vientos alisios y un entorno en estado puro.
Existe un área recreativa con fogones, mesas, agua potable y aseos. En ella disfruté de un día de lo más relajado donde el trinar de los pájaros fue el protagonista. Con respecto a las zonas de acampada, existe una colectiva, para unas 200 personas, en Llanos de Mimbre. Y otra para los más solitarios, con capacidad para un máximo de tres casetas y 10 personas, en Lomo Caraballo. Para acampar hay que pedir la autorización oportuna al Cabildo de Gran Canaria.
Se puede aprovechar para pasear por algún sendero perfectamente señalizado por los paneles indicativos y admirar las impresionantes vistas que nos ofrece el pinar. Hacia el norte «El puerto de las Nieves», hacía el oeste el «Roque Faneque» uno de los acantilados más alto del mundo. Ese día el horizonte lucía limpio de nubes y disfruté de una preciosa puesta de sol con el Teide al fondo en la vecina isla de Tenerife.