Por aquí os dejo el resumen de mi visita al “Principado de Asturias”. En primer lugar, el acceso a la reproducción total de los vídeos. Nueve días traducidos a 1hora y 15 minutos que podéis ver de una vez o por días.
Para el que disfrute leyendo os dejo los relatos. Pinchando encima de cada título iréis a la descripción completa.
Pintoresco pueblo de pescadores construido en unas empinadas laderas. Las casas simulan los palcos y la plaza el escenario. Este conjunto es conocido como el “Anfiteatro”.
Un bello paisaje formado por cuarcitas y pizarras así como depósitos cuaternarios. Donde los acantilados se funden con el protagonista de Asturias, el verde. Visito Cabo Vídio, Cabo Busto y La Playa del Silencio.
Capital del principado, una ciudad que a pesar de la lluvia invitaba a pasear y disfrutar de un mobiliario urbano exquisitamente cuidado así como de la arquitectura de sus edificios y encantadoras plazas.
Una villa ballenera en el s.XVIII en la que recorrí sus laberínticas y empinadas callejuelas en busca de la casa del Doctor Mateo, conocida serie televisiva rodada aquí. Lo mejor los edificios con sabor marinero y sus casones blasonados. Llegar a lo más alto tiene su recompensa.
Llevaba previstas varias rutas de senderismo finalmente opté por este sencillo sendero cuya recompensa es de gran belleza. Ideal para realizar con niños.
Preciosa Villa atravesada por el caprichoso Río Negro. Capital del Concejo Valdés marcada por la tradición marinera cuya configuración urbana está marcado por el trazado del Río atravesando la ciudad.
Se puede realizar andando o en bicicleta. Es de dificultad moderada y el trayecto discurre por los Concejos de Proaza, Teverga , Quirós y Santo Adriano. Opté por la ruta en bici.
Terminada la ruta en bici puse rumbo a Gijón. Quiero destacar que la visita fue superficial. Después de un breve paseo nos metimos en una sidrería y allí estuvimos hasta el anochecer. Así que Gijón, te debo otra visita.
Tarde dedicada a otro lugar que considero de obligada visita. La Cueva de la Santina, cargada de historia y naturaleza, visita totalmente enriquecedora.
Mañana en esta villa truchera y salmonera con ríncones pintorescos como La Atalaya y playas urbanas geniales. Este municipio es meta de llegada del conocido descenso.
Tarde dedicada a un paseo por la Costa Oriental en una búsqueda de huellas de dinosaurios que no resulto satisfactoria por el desconocimiento del lugar y falta de experiencia. La costa tiene un importante valor geológico. Aún así disfrute de sus paisajes.
Día entero dedicado a la antesala de los Picos de Europa. Me encantó pasear por sus calles medievales e ir descubriendo los lugares que habían sido objeto del rodaje de escenas de cine.
Sinceramente nunca me había interesado por los “Bufones” hasta que emprendí mi viaje al principado. Para el que no lo sepa, los bufones son unas oquedades en rocas a través de las cuales salen borbotones a la superficie imitando a geisers como consecuencia del choque del mar contra el acantilado. Si queréis gozar del espectáculo es imprescindibleque se den dos condiciones “pleamar” y “fuerte marejada”.Ello nos propiciará, como consecuencia del aire y agua acumulada en las cuevas, que estos se compriman y salgan a gran presión al exterior siendo incluso peligroso por lo que no es aconsejable acercarse demasiado. En mi caso la última condición no se dio ya que el mar cantábrico ese día estaba tranquilo.
La Costa Asturiana es un buen lugar para sentir vibrar los acantilados bajo nuestros pies con su estremecedor bufido. Elegí el “Campo de Bufones de Pría”.Situados próximos a Llamesde Pría, a unos 23km de Llanes y 9km de Ribadesella. Marque en el GPS “Llames de Priá” y una vez allí seguí las indicacionesque apuntaban hacia la playa de “Guadamía”.Cuando llegas a ella verás un cartel que indica que el camino agrícola que nace a la derecha lleva hasta el “Bramadorio”, como lo llaman los asturianos.Fue inevitable encontrarnos con “Guadamía”, desembocadura del río del mismo nombre. Es una playa alejada de la urbanización y carente de los servicios propios de las zonas turísticas.
El siguiente destino es “Gulpiyuri”. Según recomendaciones señale en mi GPS “Naves” y una vez allí seguí las indicaciones sugeridas. Aviso que el desvío para poder acceder al camino que lleva hasta a ella no está señalizado y es algo complicado detectar. El vehículo lo dejamos en cerca del letrero que marca el camino a la playa. Creo que su aislamiento ha permitido la buena conservación de esta joya declarada “Monumento Natural”. Caminamos a través del prado y de buenas a primera aparece en medio del verde prado.
Esta pequeñita playa, de unos 40m aproximadamente de largo, hizo que me enamorara desde el primer instante en que la vi. Trataré que mi próxima visita sea en verano y así pegarme esos chapuzones pendientes que dejé en Asturias. Está ubicada en el concejo de Llanes, al norte de Naves. Es una playa interior ya que está cerrada al mar, tan solo conecta a él a través de unos canales subterráneos que hacen que se llene y se vacíe. Poco más os puedo decir de este espacio que forma parte de la “Red Regional de Espacios Naturales protegidos”.Al igual que Guadamía, su entorno carece de servicios tales como aseos, hamacas, restaurante……
Por casualidad al salir del camino que lleva hasta “Gulpiyuri”, me topé con las indicaciones hasta la “Playa de San Antolín” y como soy muy curiosa no podía dejar de acercarme e investigar la zona. Espectacular y enorme playa de arena blanca. Es la mayor del concejo de Llanes y en sus inmediaciones si existen servicios tales como aparcamiento, cafetería-bar y servicios.
Acaba así mi viaje al “Paraíso Natural” un deleite para los sentidos y para los que amamos la naturaleza. El toque “agrio” marcado por todos los lugares que no pude descubrir por falta de tiempo. Pero siempre podré volver, ya que es un destino nada caro y apto para todos los bolsillos. Asturias, doy fe, eres un Paraíso Natural. See you 😉
Último vídeo de mi viaje Asturias. Sigo con la excursión por parajes naturales y llego hasta el campo de «Bufones de Pría» (primer intento fallido). De camino al campo de bufones me topo con la espectacular playa de «Guadamía» una preciosa mezcla de mar y montaña. Me enamoro de una playa declarada monumento natural «Gulpiyuri» y por último fruto de la casualidad descubro la extensa «San Antolín«. Como veréis en mi reflexión final quedo totalmente enamorada de este paraíso natural. Asturias……..volveré 😉
Para este último día en Asturias elijo lugares no marcados por ninguna ruta sino por mi interés personal en no querer dejarlos atrás. Tras obtener información en Internet y folletos turísticos la noche anterior, me apetecía verlos de cerca. Es el caso del mirador “El Fito”.Me ofreció una combinación de vistas espectacular, el Mar Cantábrico, las praderas y el ímpetu de los Picos de Europa.
Se encuentra en la parte oriental del principado, concretamente en el concejo de Parres fronterizo con el de Ribadesella. Para llegar hasta él tan solo hay que seguir por la carretera que parte de Arriondas dirección Colunga y nos lo encontraremos al borde de la carretera. Existe una zona de parking para el vehículo y su acceso no entraña ningún esfuerzo ni complejidad.
El mirador es una estructura de hormigóncon forma de O.V.N.I. que se eleva sobre el suelo un metro y medio aproximadamente. Fue inaugurado en 1927. En mi opinión este macizo de hormigón desentona con el entornoya que las bellas panorámicas son perfectamente apreciables sin necesidad de subir a él. Unas vistas muy recomendadas.
Toca seguir con la excursión y ahora me dirijo a la “Cuevona”.Sin lugar a dudas la sorpresa del día. Esta cavidad es el único acceso que existe para poder entrar al pueblo “Cuevas del Agua”. Impactante cavidad de unos 300m de longitud. Está ubicada en el concejo de Ribadesella.
Conserva excelentes formaciones que junto a su bóveda la convierten en un entorno de gran singularidad y belleza. Quedamos atónitos mientras la observábamos en un primer contacto a través del cristal del coche.
Las zonas iluminadaspermiten ver estalactitas, estalagmitas e incluso un arroyo. El paseo a pié es 100% recomendable. Pero con cautela ya que no está delimitado y se realiza por el mismo asfalto por el que circulan los coches. Poco más os puedo decir, hay que ir.
Escrito
en 13/09/2013